Son de tu gusto los tractores,
de mi gusto las carreteras,
al igual que la congruencia
inexistente en este espacio.
Ahí rondando temas ignorados,
sacrifico segundos de cielo
para cifrar tu mismo código
que mantiene mis ojos fascinados.
Necio mi silencio,
provocado por la vergüenza,
provocada por tu presencia,
paralizando mi hablar.
Temo jamás lograr notar
que con tractores se construyen carreteras
y perderme entre tantos paisajes
consumido por mi inexperiencia.
Indefinidamente
si me guías, si lo hago yo,
no importa si comprendo
con mucha o poca atención.
Mencionando que no domino
por completo tu lenguaje,
y me pierdo entre las palabras,
puedo vivir perdido y sin comprensión,
pero me haces reír.
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